Los no mestizos

Horacio Poppe Inch

El vocero presidencial dijo textualmente que no puede autodefinirse culturalmente porque viene de corrientes migratorias. Y que el mestizo no existe como ente nacional porque no se puede determinar exactamente donde vive. Así de torpe.
Que él no pueda definirse como parte de una cultura o prefiera «autopercibirse» como un «don nadie», pese a hablar la lengua de Cervantes y lucir una barba como la de Pizarro, es una cobardía suya que no tenemos porqué hacerla nuestra.
Que al señor se le «olvide» que todos llegamos aquí a través de distintas oleadas migratorias, incluidos los indígenas, tras originarse la especie humana en África, es una total falta de honestidad intelectual. Materia de escuela.
Peor aún, sostener que no existimos porque no se sabe donde vivimos, es tomarnos a todos como a tontos de baba. Como si el Censo no sirviera precisamente para determinar este tipo cosas.
¿A qué le temen?
A que seamos mayoría, ¿no?
A que exijamos una participación equitativa de las políticas públicas, ¿no?
PORQUE AQUÍ ESTÁN EN JUEGO LOS RECURSOS, no ese romanticismo folclórico de sentirse hombre de tierra adentro y raíces profundas, como algunos se lo están tomando. No sean ingenuos.
No, los masistas están viendo de sobrevivir a través de un «sistema de privilegios» que no descuide la coima que debe llegar como pan de cada día al dirigente y al sindicato.
¿Qué es el FONDO INDÍGENA sino una política económica que privilegia a unos y descarta a otros por su naturaleza cultural, fenotípica y lingüística?
Ellos lo que quieren es dinero a manos llenas y sin control, abusando de su condición de «origen» (antes de «clase», marxismo puro).
MÁS CLARO AÚN:
Que la boleta censal no incluya a un segmento importante de la población nacional, tiene fines de SEGREGACIÓN RACIAL, porque de sus resultados se modelan políticas públicas con «asignación presupuestaria».
Eso es racismo aquí o en la China. Y en todo momento.
No aparecer en la lista de integrantes de tu país, como si fueras paria, no puede reducirse a un simple problema emocional de «discriminación», como plantean algunos «tristes» diputados.
Que te aparten, que te invisibilicen en dicha encuesta es una especie de bullying económico, institucional y territorial (Apartheid en otras palabras).
¿Mestizos? No. BOLIVIANOS.
Eso de mestizo es una ambigüedad, es quedarse a mitad de camino, es padecer en el limbo.
El chileno es chileno, el argentino es argentino, o sino vayan y pregúntenles. Aquí somos bolivianos y punto.
Que a muchos les cueste afirmar esto último, que no todos estén convencidos de serlo o que muchos prefieran ser otra cosa, ha sido la «debilidad» de la que Linera y su extinto Grupo Comuna se han aprovechado en la Asamblea Constituyente para desintegrarnos como sociedad, torpedeándonos con el concepto de plurinacionalidad.
Por eso, más vale por ahora poner por encima los problemas comunes a todas las regiones y luego disputar los particulares. O nos van a tragar. ¿Se entiende, no?