BOLIVIA NO MORIRÁ, trigésima Tercer Parte
René Soria Galvarro Haensel
No obstante que hace dieciseís años, el narco neo comunismo masista, está destruyendo nuestra República, y su espíritu, so pretexto de proceso de cambio y revolución democrática y cultural; grosera careta del socialismo del siglo XXI, Bolivia prevalecerá. Hoy, hace poco, retorné del exterior y, tal como la primera vez, el 10 de febrero de 2021, en el aeropuerto Viru Viru sentí una profunda y dolorosa puñalada, una hiriente y terrible indignación; sentí que no había llegado a Santa Cruz-Bolivia.
Fue como una horrible pesadilla, como un mal sueño, porque estaba en otro país, NO en el mío! Estaba en un país extraño, ajeno, diferente y muy agresivo, en el que flameaba la wiphala y, en lugar de nuestro Escudo Nacional, que fue borrado, estaba un escudo andino, llamado chakana. Esta última vez, el golpe y la herida fueron mayores, porque apenas ingresé a la sala internacional, lo primero que ví y leí fue un letrero que dice: «Bienvenido al Estado Plurinacional de Bolivia» y al centro, ya no más el Escudo de Bolivia, pero sí la chakana. En todos los cubículos de control de inmigración la wiphala, y en el salón principal un mural con propaganda del parque Noel Kempff Mercado, flanqueado por la chakana, de tal manera que para un visitante o turista extranjero, y también nacional, el parque Noel Kempff está en el occidente andino.
Varias veces, no pocas, escribí al respecto y añadí fotos; y pedí acción enérgica del gobierno departamental, municipal, del Comité Cívico, y de otros; pero no hubo reacción, hasta que recién hoy, después de un año y cuatro meses, leí un comunicado del Comité que exige una inmediata explicación, un acto de desagravio y las disculpas de la policía, por el desaire al pueblo cruceño, en un acto de la policía en la plaza 24 de Septiembre, en el que no fueron izadas la bandera de Santa Cruz ni la flor de Patujú. Penosamente, día a día, la toma y avasallamiento cultural, la usurpación y suplantación de los símbolos nacionales y departamentales no solo avanza sino que es vivo, visible y real; se ve, se siente y se huele.
Lo peor y más doloroso, la peor pérdida, más que la toma de tierras, los bloqueos, la destrucción del aparato productivo cruceño, la destrucción de la economía, la pérdida de recursos millonarios del Fondo de Pensiones, las trabas en todas las áreas de la actividad económica; es, sin duda, LA PERDIDA Y DESTRUCCION DEL ALMA o Anima, que te roben y pierdas el ALMA, eso sí que duele, es la destrucción de la identidad y del Ser, de la personalidad y la cultura. Sin ALMA no somos nada ni nadie, somos cero, somos esclavos del otro. Qué es la wiphala? Según el filósofo y político Aymara, Fernando Untoja, la wiphala y el año nuevo Aymara son inventos recientes. La wiphala, él dice, que fue creada en su casa, en su computadora, por Germán Choquehuanca. Tanto así es veraz su declaración, que en la Revolución del 9 de abril de 1952, en la que participaron mineros, campesinos e indígenas andinos, la única bandera que enarbolan era la de Bolivia.
La wiphala no se conocía, NÓ, pero NÓ! Ayer, el vicepresidente, de dudosa elección, David Choquehuanca, recomendó no tener sexo, no comer carne ni tomar alcohol, durante 40 días, para recibir el año nuevo andino – y añadió – Amazónico y Chaqueño. Es evidente, sin duda, que el año nuevo andino, es la copia o que tiene como fuente de inspiración la Cuaresma y Pascua Cristiana, la Semana Santa, los 40 días de Jesús en el desierto, sus cuarenta días con sus discípulos, los 40 años de Moisés y los hebreos…etc.
Como conclusión, debo reiterar lo dicho en muchos de mis artículos, que los primeros mandatarios, de dudosa elección, y el jefe del cártel del chapare; todos los días violan y pisotean la Constitución y las leyes, los símbolos patrios; fomentan la división de Bolivia, la ruptura entre occidente y oriente, la destrucción de Bolivia y de la unidad, el odio; todo ese daño, es por demás suficiente para revocatoria de mandato y traición a la Patria; pero estamos en el país de los sordos, de los indiferentes y de los pusilánimes. Repito, insisto y persisto, y grito: CABILDO, CABILDO Y CABILDO es el pueblo libre, democrático y Cristiano el que debe decir y decidir cómo BOLIVIA NO MORIRÁ. Dios nos guíe e ilumine.