
Fuente: Reacción Charquina
A continuación, transcribimos un artículo muy interesante del número 24 de la revista Cultura Boliviana. Fue escrito por Teresa Gisbert, madre del expresidente Carlos Mesa, y trata acerca de la Revolución de La Paz, en el marco de la Guerra Separatista de América, también conocida como Revoluciones del Reino de Indias o Guerras de Independencia Latinoamericanas. En el artículo, la historiadora hispanista boliviana (estudiosa de la hispanidad) trata de calmar los ánimos de algunos nacionalistas que atacaron verbalmente a ella y a otros dos historiadores que colaboraron en la edición del libro Manual de historia de Bolivia. En ese libro, cuyo fragmento en cuestión se puede leer haciendo clic aquí, se revela lo que parece ser un arrepentimiento del caudillo revolucionario Pedro Domingo Murillo, quien manifiesta lealtad a la monarquía hispánica y fidelidad a las autoridades realistas.
Respecto a los comunicados y opiniones vertidos en la prensa y transmitidos por radio durante los últimos días acerca de la figura de Pedro Domingo Murillo, me cabe declarar lo siguiente:
1º Soy boliviana y he nacido en La Paz.
2º En el libro titulado «Manual de Historia de Bolivia«, escrito por el doctor Humberto Vázquez Machicado, el Arq. José de Mesa y yo, no he tenido parte en lo concerniente a la revolución del 16 de Julio que es obra del prestigioso escritor Vázquez Machicado, como se indica en la advertencia de los autores (pág. X) y consta por las cabezas de página.
3º Quiero dejar constancia, como la tienen cuantos han leído las obras del historiador Vázquez Machicado y han asistido a sus clases universitarias, de la honradez profesional que lo caracterizaba, sin afirmar jamás como historiador aquello que no constase en los documentos. Dentro del amplio margen que permita la interpretación histórica ha sido siempre fiel al hecho mismo, constatándolo por documentos contemporáneos y no por comentarios posteriores susceptibles siempre de rectificaciones y enfoques interesados. En este sentido y en honor al historiador muerto que ya no puede defenderse, me cabe acompañar los documentos referentes a Murillo que han servido al Sr. Vázquez para redactar su historia; todos ellos han sido publicados por la Honorable Alcaldía Municipal de La Paz y existen en el Archivo de la Nación Argentina.
En el tomo segundo de los «Documentos para la Historia de la Revolución de 1809» recopilación de Carlos Ponce Sanginés y Raúl Alfonso García existen las siguientes declaraciones:
DECLARACION DE MELCHOR JIMENEZ.- En la ob. cit. pág. 159, el testigo declara la alegría de Murillo al recibir la noticia de la llegada de los emisarios de Goyeneche.
DECLARACION DE COSIO, ALIAS EL MAZAMORRA.- En la ob. cit. pág. 198, línea II y ss., Mazamorra indica la existencia de comisionados de parte de Murillo ante Goyeneche. Ibídem pág. 200, el mismo indica las insinuaciones de Murillo «para que con arreglo a lo resuelto por el Virrey se disolviese la revolución y restituyese las legítimas autoridades».
DECLARACION DE SAGARNAGA. En la ob. cit. 228, ln. 23 y ss., el declarante indica haber invitado a los oficiales a entregar las armas y que se negaron, pensando efectuar dicha entrega en La Paz por haber dejado a Murillo y a los demás en disposición de hacerlo. En la misma declaración pág. 229 lns, 29, 33 y 34, Sagárnaga dice que Indaburu y Medina se oponían a la dicha entrega.
DECLARACIONES DE MARIANO GRANEROS.- En la ob. cit. pág. 237, preguntado el confesante el por qué de la prisión de Murillo, dijo el recelo que había «de que Murillo quisiese entregar el cuartel al Alcalde».
DECLARACION DE MURILLO.- En la ob. cit. pág. 248, Murillo culpa como comandante de la sublevación a Juan Pedro de Indaburu. En la misma confesión pág. 249, culpa a su vez como director de la plebe a Gregorio García Lanza. En la misma pág. pide clemencia en obsequio a haber mantenido correspondencia con Goyeneche a fin de entregarle la guarnición. En la pág. 253 el confesante dice: «Que en estas circunstancias procedió de acuerdo con los Edecanes del señor General Goyeneche a hacer la expresada entrega». Referente a esta confesión ver págs. 242 a 255.
DECLARACION DEL CURA MEDINA.- En la ob. cit. pág. 285 In. 13 y ss. indica que Murillo mediante un oficio el más sumiso se puso a las órdenes de Goyeneche.
ACUSACION DEL FISCAL.- En la ob. cit. pág. 308 el Fiscal luego de señalar los delitos de Murillo dice: «no tienen otra excepción que las últimas ocurrencias de haber escrito a su V.S.M.Y. que entregaría las armas a su disposición. Pese a este descargo se le dio la sentencia de muerte.
Todos estos Documentos los publica la Alcaldía Municipal de La Paz el año 1954. Los originales están en el Archivo General de la Nación – Buenos Aires – División Colonia – Sala VI, Cuerpo X, Anaquel II, No 5. En el lomo del tomo correspondiente se lee «Revolución de La Paz Tomo II».
Existe aún una declaración más, la de Tomás Domingo de Orrantia, de- legado de Murillo ante los edecanes de Goyeneche quien dice: «que él condujo un pliego de dicho Murillo y que el encargo secreto que llevó fue el de inquirir con sagacidad el carácter y las intenciones de dicho señor». Agrega: «Que también expuso a nombre de Murillo al señor General que las Armas estaban a su disposición, y se entregarían del modo y en el lugar que quisiese recibirlas». (Tomo II de la b. cit. pág. 745).
Las cartas de Pedro Domingo Murillo a Goyeneche se hallan publicadas en el tomo IV de la obra citada págs. 347 al 353. Pertenecen al archivo del Conde de Guaqui, Caja 4, carpetas 5 y 3. No las transcribo por hallarse a mano de quien quiera consultarlas.
En la obra de Manuel María Pinto «La Revolución en la Intendencia de La Paz…», ob. cit. tomo I, se hallan varias notas referentes al asunto que nos ocupa. Doy la nota bibliográfica para quien desee consultarlas:
Pág. 59, Ins. 32 y ss. Pág. 160 In. 1 y ss. Pág. 164 In. 7 y ss. Pág. 167 in. 2 y 3. Pág. 170 In. 28 y ss. Pág. 178 ln. 2 y ss. Pág. 179 In. y 1 ss. En la pág. 192, en nota, se señala dos comunicaciones de Murillo dirigidas a Goyeneche por intermedio de su hija Tomasa. En el apéndice de la obra citada pág. CIII y CIV, hay una carta de Murillo a Ramón de Loyza pidiendo se testifique su actuación a las órdenes de Seguriola cuando la rebelión de Tupac Katari. En la pág. CVII, hay una justificación ante Julián Morillo señalando los mismos méritos.
En las págs. CLIV y CLV, Goyeneche acusa recibo de dos cartas de Murillo fechadas el 7 de octubre y el 6 de noviembre de 1809, donde se le daba cuenta de los acontecimientos.
Manuel María Pinto hace referencia también a las confesiones de Murillo y Medina antes señaladas.
No soy especialista en la materia (historia de la guerra de la independencia) pero expongo estos documentos como parte del material objetivo que puede servir para una posterior interpretación. A quien los estudia, expone o interpreta no se puede tildar de difamador, ya que como éste cualquier material documental susceptible de ser visto desde muchos ángulos.
Antes de concluir quiero indicar que no quiero entrar en polémica respecto al tema, mi posición es la del boliviano que cree en la obligación que tenemos todos de enfrentarnos valientemente con nuestras realidades: nuestra realidad social, nuestra realidad económica o nuestra realidad histórica.
«La Nación», 21 de agosto de 1958.
— Revista Cultura Boliviana. Nº 24. La traición de Pedro D. Murillo. La Paz, 1958. Pág. 10.

