¿Quién es Beria en Bolivia? ¿Y Vishinski?
Entre 1928 y 1953, desaparecieron en la Unión Soviética 15 millones de personas, en campos de concentración que han pasado a la historia a ser conocidos como ‘gulags’, término que en realidad proviene de la sigla del servicio estatal que tenía a su cargo la administración de las penitenciarías de la época… Bueno, la realidad puede superar los delirios más tenebrosos de la ficción: en los hechos, los gulags eran pequeñas islas diseminadas por los mares de la Unión Soviética, ¡que no existían en los mapas oficiales del régimen!, según cuenta el premio nobel de literatura Aleksandr Solzhenitzyn – no se puede negar que el totalitarismo puede llegar también a ser muy sutil, ¿no?
El caso es que el ideólogo y operador más eficiente de este ‘sistema’ – bajo las órdenes de Stalin, claro-, era Lavrenti Beria. Él se encargaba de ‘armar los casos’, con fiscales obsecuentes entre los que se destacó, por méritos reconocidos de prevaricato, crueldad y soberbia, Andréi Vishinski… A este último le tocó ser el fiscal acusador en los terribles ‘procesos de Moscú’, en 1936 y 1938, que sirvieron para ejecutar inclusive a héroes de la Revolución Rusa como Zinóviev, Kámenev y Bujarin, porque dejaban en evidencia la gloriosa mediocridad de Stalin… Trotski, que ya estaba en el exilio desde 1928, peregrinando por diferentes países que lo acogían temporalmente, fue asesinado finalmente en México por el catalán Ramón Mercader, que actuó bajo el mando del servicio de inteligencia de la Unión Soviética, en agosto de 1940 –después de la muerte de Lenin, en enero de 1924, Trotski tendría que haber sido el sucesor natural, pero era judío; su exclusión, por un motivo de esta naturaleza, confirma el carácter fascista del comunismo soviético desde la cuna…
No es ocioso recordar el destino que tuvo esta siniestra casta de ‘revolucionarios’, que urdieron lo que ahora en la historia se denomina “Juicios Espectáculo”: Beria fue ejecutado poco después de la muerte de Stalin y Vishinski murió en Nueva York – en 1956, su memoria fue despojada de todos los honores burocráticos, sus textos ‘judiciales’ fueron prohibidos y sus herederos se quedaron sin prebendas estatales…
Guardando las distancias –tomando en cuenta que en Bolivia no se podría ejecutar un ‘sistema’ de aquellas proporciones, porque, para comenzar, sumando inclusive a la ingente burocracia del Estado Plurinacional apenas llegamos a 11 millones de habitantes-, cabe hacer las siguientes preguntas: ¿Quién tramó lo que ocurrió en Pando? ¿Quién tramó el referéndum revocatorio, en una coyuntura en la que el gobierno totalitario del MAS se encontraba en su momento de mayor debilidad política?, ¿Quién tramó la estrategia para deshacerse judicialmente de los demás prefectos de oposición, que habían ganado su cargo en elecciones similares a las que están llevando a Evo Morales a postularse a una tercera reelección?, ¿quién tramó el Estado neofascista de la nueva Constitución Política del Estado?, ¿quién tramó las ejecuciones sumarísimas en el hotel Las Américas? ¿Quién tramó las extorsiones reconocidas y descubiertas en Brasil y Estados Unidos? ¿Quién es Lavrenti Beria en Bolivia? Ya sabemos que el Andréi Vishinski plurinacional está en Brasil. (20140323)
El Deber/Séptimo Día