Embarazo adolescente: falta de oportunidades y violencia sexual
Nueva publicación de Plan y Unicef muestra las razones que conllevan a este fenómeno social entre las adolescentes.
Panamá, 29 de enero de 2015-. En América Latina, una tercera parte de los embarazos corresponde a menores de 18 años, y casi un 20% de éstos a niñas menores de 15 años. En estas edades, el embarazo en adolescentes suele ser producto de violencia sexual, dado que las adolescentes están expuestas a condiciones de alta vulnerabilidad, entre ellas a varios tipos de violencia y riesgos.
Esto queda plasmado en la publicación “Vivencias y relatos sobre el embarazo en adolescentes: Una aproximación a los factores culturales, sociales y emocionales a partir de un estudio en seis países de la región”, realizado por Plan International y UNICEF.
Esta publicación refleja las complejidades asociadas al embarazo adolescente y determina que entre los motivos por los que muchas adolescentes quedan embarazadas a tan corta edad está la falta de información, la falta de oportunidades, las expectativas sociales, y la violencia sexual.
Las niñas que quedan embarazadas antes de los 18 años rara vez pueden ejercer sus derechos a la educación, la salud, la protección y a un nivel de vida adecuado. Pierden su niñez, y deben asumir obligaciones de adultas.
Adicionalmente, el riesgo de morir por causas relacionadas al embarazo se duplica si quedan embarazadas antes de los 15 años de edad. Proyecciones recientes plantean que la tasa de fecundidad adolescente en América Latina será la más alta del mundo, y que se mantendrá estable durante el periodo 2020-2100.
Tjipke Bergsma, Director Regional de Plan International para América Latina, dice que el estudio confirma lo que ya sabemos, y que el enfoque ahora debe ser de buscar soluciones a largo plazo.
“Abordar los problemas subyacentes, como la cultura machista, la desigualdad de género, las actitudes negativas de los niños y los hombres hacia las niñas y mujeres, las normas que perpetúan la violencia y la impunidad, y la pobreza que obliga a las niñas a tener relaciones sexuales con hombres mayores como estrategia de supervivencia, se deben tratar a través de políticas públicas, y acciones concretas”, asegura.
Por su parte, Bernt Aasen, Director Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, afirma que UNICEF está muy preocupado por las altas tasas de embarazo adolescente en la región pero se congratula porque la mayoría de los países en la región ha adoptado planes y programas que buscan prevenir el embarazo en adolescentes y asegurar que las madres puedan recibir atención médica adecuada y seguir sus estudios.
“Es fundamental que las políticas públicas aborden los diferentes factores asociados al embarazo adolescente y trabajen con los diferentes sectores involucrados. Tan importante es el fortalecimiento de los sistemas penales para que los crímenes asociados a la violencia sexual no queden impunes como la mejora en las condiciones sociales de los hogares, el trabajo de abogacía en las comunidades para empoderar a las adolescentes, el fortalecimiento de las capacidades de los sectores de salud y de educación, y la promoción de los derechos de las adolescentes”, indica Aasen.
Plan Internacional y UNICEF renuevan su compromiso de apoyar, junto con otros actores y agencias de Naciones Unidas, las acciones que busquen prevenir el embarazo adolescente y la realización de los derechos de todas las niñas sin excepción.
Plan Internacional y UNICEF apoyan políticas y programas que buscan contribuir a la realización de los derechos de la niñez y la adolescencia, incluyendo el derecho de las niñas y adolescentes a vivir su infancia y su adolescencia de manera plena y a ser protegidas de cualquier tipo de violencia.