BOLIVIA Y NOSOTROS LOS CAMBAS
Ismael Schabib Montero
Escribo esta nota con el propósito de hacer justicia histórica y pedir una oportunidad para el Oriente boliviano, con la esperanza que la lean, especialmente, jóvenes del Occidente del país que pudieran estar confundidos por alguna información falsa y perversa. Este gobierno mentiroso hizo propaganda política y la hace todavía, acusando de “vende patria”, racistas, regionalistas, separatistas a los cambas; analicemos.
El Gral. José Miguel de Velasco fue el primer presidente oriental, cuatro veces presidente interino, uno de los rivales del Gral. Ballivián, pero que cuando vio peligrar la patria ante la amenaza del Perú, le cedió lo mejor de la facción del ejército que él lideraba, especialmente armamento, los fusiles más modernos del arsenal militar boliviano. El Gral. Agustín Saavedra, también nacido en Santa Cruz, comandó la carga de caballería que definió la batalla de Ingavi, el 18 de noviembre de 1841. Y esto lo saben muy pocos bolivianos, porque el gobierno central se ha encargado de silenciarlo.
En la Guerra del Acre, el Sr. Nicolás Suárez, cruceño, y para mí el héroe más importante de la historia nacional, con sus propios recursos conformó la “Columna Porvenir” y defendió exitosamente nuestro territorio; gracias a él conservamos Pando (60 mil Km cuadrados). “La Columna Porvenir”, conformada por siringueros benianos y cruceños, expulsaron a los separatistas de Puerto Rico y Bahía (la actual Cobija). Estamos hablando de participación camba exitosa en la consolidación del territorio nacional.
Después de la Guerra del Pacífico y como consecuencia del Tratado de Paz y Amistad firmado entre Bolivia y Chile en 1904, cuyo Artículo 2º define el límite territorial entre ambos países, quedamos sin costa al Pacífico. La sociedad cruceña en un documento leído y Dirigido al Congreso y a la Nación, mostró su desacuerdo con los ferrocarriles que se proponía construir, como resarcimiento, entre los puertos chilenos y Bolivia. Era, en opinión cruceña, atar el destino de Bolivia al Pacífico, a los intereses de chilenos y peruanos. En ese Memorándum, que así se lo denominó, se proponía como solución mirar al Atlántico mediante la construcción de un ferrocarril que comunique a Cochabamba con el río Paraguay y el Pilcomayo. ¡Que no se ruegue vergonzosamente a Chile una salida al mar por el Pacífico! Los cruceños plasmaron este reclamo y este ideario en el “El Memorándum de Santa Cruz de 1904”, argumentando que esos ferrocarriles matarían la industria nacional, como así ocurrió. Aparte de la invasión militar sufrimos la invasión económica con esos ferrocarriles y los chilenos se apropiaron de nuestra economía inundando al país con su industria y adueñándose del producto de las minas, mismas que fueron recuperadas, no por los políticos sino por la genialidad de D. Simón Patiño, mediante su intervención en la Bolsa de Santiago. Aquel Memorándum visionario continúa teniendo vigencia: “No hacemos una amenaza subversiva, muy lejos estamos de agregar mas desgracias a nuestra desgraciada República. Los hechos se encargarán de comprobar nuestras afirmaciones, cuando el mal no tenga remedio. Cuando Bolivia agonise víctima de la política absorcionista de Chile y aún de Perú.”
Sobre la Guerra del Chaco, J. Valerie Fifer (historiadora inglesa de la Universidad de Cambridge, autora de “Bolivia”, páginas 349 y 350, primera edición en castellano, Ed. Francisco de Aguirre S.A. Buenos Aires – Santiago) hace el siguiente comentario: “el vacío que se creó en el oriente fue aún más grave que la anulación de las demandas territoriales…los reclutamientos de hombres en los departamentos de Beni y Santa Cruz, determinó una gran despoblación de las tierras bajas de Bolivia…muchos consideran que ese fue en realidad, el saldo más terrible de la guerra, pues el oriente no tenía la capacidad para ver diezmado su capital humano…” El Gral. Germán Busch Becerra, nacido en Santa Cruz y criado en el Beni, fue nuestro gran héroe en esa guerra (ver “Masamaclay”, Querejazu Calvo).
En 1967, en Ñancahuazú, se derrota al invasor extranjero “Che” Guevara; se distinguieron el cruceño Gary Prado Salmón, que capturó a Guevara, y el beniano Moises Shiriqui Bejarano, de la “Compañía Trinidad”, que eliminó a varios guerrilleros importantes, marcando el principio del final de la aventura guerrillera. Estos dos brillantes militares cambas escribieron con letras de oro en las páginas de la historia de la Patria. Y el presidente cruceño Hugo Banzer, en los años 70s, hizo la mejor negociación con Chile para recuperar el mar.
Entonces, ¿Dónde están los cambas vende patria? ¿Va a ser cierto solo porque lo dice unos cuantos narcos mentirosos? ¡Claro que no! ¡Amamos Bolivia, por eso siempre la hemos defendido! Los hechos cantan.
Con estos argumentos les sugiero, si se diera el caso, que confíen su voto en un candidato del Oriente boliviano. “No pedimos a nuestros compatriotas que nos traigan el progreso….Tal vez ellos necesitan mas de ese progreso que nosotros; el progreso vendrá paulatinamente, nosotros lo obtendremos con nuestros esfuerzos” (Memorándum 1904). Tengan la seguridad que no defraudará; esa es la oportunidad que pido.