Los lazos de sangre y de cultura que nos unen a los pueblos del oriente boliviano son indestructibles.
Bolivia le debe mucho al Beni, la defensa del Acre fue financiada por don Nicolás Suárez, por la total ausencia de estado.
Desde el Beni se realizó la primera marcha indígena por tierra y territorio que fue recibida por el entonces presidente Jaime Paz Zamora al contrario de la brutal represión que el gobierno de Evo Morales realizó en Chaparina contra los indígenas del oriente.
Fueron los benianos quienes iniciaron la resistencia contra la construcción de la narcocarretera del TIPNIS, defendiendo un parque natural en su territorio y evitando la ampliación de los cultivos de coca para el narcotrafico.
El Beni ha contribuido a la seguridad alimentaria del país durante décadas produciendo carne que era consumida por los centros mineros y las poblaciones del altiplano.
Hoy el Beni nos necesita a todos, el puente no sólo beneficiará a Guayaramerin sino a toda Bolivia, su impacto en el desarrollo nacional será fundamental para integrar nuestro país al mundo.
Hagamos de la reivindicación del Beni un tema nacional, no los dejemos solos, contribuyamos a qué triunfe la racionalidad y el progreso de nuestro pueblo.
!!!!VIVA EL BENI…..VIVA BOLIVIA!!!!