¿EL TRIUNFO DE LA DESESPERACIÓN?
Mientras en Santa Cruz estamos entusiasmados con las elecciones enterándonos de cómo debemos votar, S.E. anima a sus seguidores – sobre todo en El Alto – a que recorran la ciudad, puerta por puerta, pidiendo el voto para su perdidoso candidato Patana, que implora una oportunidad más para enmendar sus errores. “Tenemos tiempo todavía”, ha dicho S.E. queriendo aprovecharse de que el resto de los partidos y candidatos tendrá que cumplir con lo dispuesto por el obediente y nefasto Tribunal Supremo Electoral (TSE), en sentido de que las campañas proselitistas han concluido. Si S.E. dice que hay que aprovechar el tiempo hasta el día de los comicios, veremos quiénes en el TSE se atreven a mostrarle el reglamento al Jefazo.
En la misma tónica, el Vice ha estado en El Alto – por supuesto que fue transmitido en directo por TVB – disparando a quemarropa contra la oposición, con furibundos ataques contra los neoliberales – Doria Medina en especial – acusándolos de ladrones y saboteadores y volviendo sobre el viejo cuento de que alguien de los “separatistas” quiso atentar contra la vida de S.E. Cuando el Vice muestra el rostro de la derrota ante los alteños e insta con amenazas a no detenerse frente a la sorprendente Soledad Chapetón, en Santa Cruz la televisión continúa con la propaganda “subliminal” del trencito urbano ofrecido por S.E.
Sin embargo, ha llegado la hora de poner las cartas sobre la mesa. Ahora sí que tiene que imponerse la democracia sobre el autoritarismo etnocentrista. Pese a todas las matufias del TSE – con Ernesto Suárez en el Beni y con otros candidatos – varios partidos y agrupaciones políticas, sin alianzas entre sí, producto del repudio ciudadano, pueden darle un revés contundente al MAS en toda la república y detener esa desbocada carrera de irresponsabilidad y derroche. Este fenómeno de espontáneo rechazo a la década saudita del masismo, que prefiere Dubai a Tihuanacu, es producto de la desesperación de la gente. Hasta los amarillos, siempre tibios y acobardados, recibirán un pinchazo de adrenalina.
A falta de un único líder de unidad que no se pudo lograr, han aparecido fuertes liderazgos regionales contrarios al “cambio” fullero, que han desbaratado la plácida siesta política, hasta ahora sin sobresaltos, en que estaba sumergido el MAS. Sólo S.E. parece que no dormía tranquilo y que tenía pesadillas. Los ha despertado un baldazo de agua fría con la noticia de que Patana pierde en El Alto, el solemne Mendoza pierde la alcaldía paceña, y la sospechosa Huanca la Gobernación.
La tarea de hoy será difícil porque no es nada simple ganarle al Gobierno y a la autoridad electoral, aliados. Aunque el TSE ponga carita de “yo no fui” lo cierto es que ha hecho barbaridades de las que tendrá que responder algún día, cuando se restituya la justicia en Bolivia. Ciertamente la Banda de los Cuatro resultaron unos niños de teta frente a estos “notables”. San Pedro los recibirá con los brazos abiertos (nos referimos a la cárcel). Liquidaron a Rebeca Delgado en Cochabamba pero parece que se les va a esfumar la alcaldía allí. Quisieron tumbar candidatos en Tarija y dizque a Rodrigo Paz no le disputa nadie la elección y también podría ganar Oliva en el departamento. Hay dudas en Potosí y Oruro. Al parecer, sólo Pando lo tienen asegurado por los cuatro costados, después de la trampa sangrienta de Porvenir.
El acto bochornoso que el TSE armó en el Beni no tiene parangón en toda la última etapa democrática. Abundar en detalles sobre la inhabilitación de Ernesto Suárez es ocioso y ya provoca hasta vergüenza ajena. Allí se tejió una conjura siniestra entre el Ejecutivo y el TSE. Fue tal la patraña que los responsables del proceso electoral le dieron largas al asunto hasta que observaron que Suárez no tendría tiempo para rearmar ninguna nueva candidatura. En estos momentos reina la confusión más absoluta y muchos desean postergar las elecciones en el departamento. No obstante, dudamos de que el MAS vaya a tener mucho que festejar en Trinidad.
Hoy se verá también que el tan cacareado triunfo masista en Santa Cruz durante las presidenciales no fue que todo Santa Cruz se hubiera pintado de azul, sino que, por las ambiciones estúpidas de la oposición, le dejaron el camino abierto al MAS. Pero ese error sólo ha servido para pasarle la miel por los labios. Ahora tendrá que probar el vinagre. S.E. no obtendrá nada importante, así haya ofrecido, si gana, trenes rápidos, tranvías, doble vías, y todo lo que la demagogia puede admitir, que no tiene límite.
Así pues, a esperar los resultados, esperanzados en que se termine una hegemonía perjudicial para todos. Que S.E. decida si va a gobernar con los gobernadores y alcaldes de la oposición o no. Si no lo hace, si continúa cerril junto al verbo ofensivo del Vice, tenemos la impresión de que gobernará aislado, en la más depresiva soledad.