“CAMBAS DE MIERDA”
Ismael Schabib Montero
“El sentido de pertenencia supone que el ser humano desarrolle una actitud consciente respecto a otras personas, en quienes se ve reflejado por identificarse con sus valores y costumbres. Este sentido, por otra parte, confiere una conducta activa al individuo que está dispuesto a defender su grupo y a manifestar su adhesión, apoyo o inclusión a la comunidad de manera pública. Un ejemplo de sentido de pertenencia puede encontrarse en la relación entre una persona y su país. El lugar de nacimiento, sumado a la crianza y la educación en un determinado territorio, puede generar un sentido de pertenencia que lleve a un individuo a identificarse con sus compatriotas y a desear el bien a su nación…”
La frase “camba de mierda” no es un invento de los collas (la región andina de Bolivia que perteneció al Collasuyo, de los incas), es un invento de nosotros, los propios cambas. Decíamos “camba de mierda” cuando queríamos insultar a otra persona en el Oriente boliviano. Ahora le decimos “camba de mierda” a una persona indeseable por su actitud innoble, oportunista.
El centralismo, primero agredió salvajemente al Departamento Pando, inicialmente con la masacre de Porvenir, después entró una unidad del ejército por aire disparando enloquecida a nadie en el aeropuerto, disparando a una población pequeña, inerme, desprotegida, que la agredían militares y milicianos masistas, y por supuesto venezolanos. Secuestraron al Gobernador Fernández con la cobertura de mil soldados. Esta fue una invasión real, porque posteriormente se hizo un trasplante racial y cultural destruyendo la identidad regional. No hubiera sido posible esta invasión sin la colaboración de gente pandina, de unos “cambas de mierda”.
Hace unos años hubo una mega inundación en el Beni, dejando destrucción por todo ello; mucha gente clamó por ayuda internacional, pidió que se declare a la región “Zona de Desastre Nacional”, pero el gobierno se negó y autoridades locales benianas manifestaron que no era necesaria la ayuda, y no sólo eso, sino que la colaboración del gobierno para reconstruir o construir las viviendas dañadas por la inundación estuvo condicionada a que los dueños renuncien a tener herederos, que las viviendas pasarían a manos del Estado con la muerte de los propietarios. Esto se lo facilitaron al centralismo etnocentrista sus cómplices benianos, “los cambas de mierda”.
Ahora le tocó el turno a Santa Cruz, arde la Chiquitania, gracias a la imprudencia de los colonos andinos, desconocedores de la cultura del incendio controlado, a la autorización del gobierno para hacer chaqueos con la complicidad del empresariado cruceño y porque autoridades del INRA están haciendo «chichijco” con los parques, vendiendo tierras para que se extienda la marea narco cocalera que ya depredó el TIPNIS. Esto no hubiera sido posible sin la colaboración de sus cómplices, malos cruceños, los “cambas de mierda”.
Entonces concluyamos que “cambas de mierda” son los benianos, pandinos y cruceños que no tienen sentimiento de pertenencia por la región que los vio nacer, que son colaboradores del etnocentrismo andino depredador y odiador, que al mismo tiempo los desprecia y los trata como a masistas de segunda categoría.
No me agrada decir esto, pero me sale del alma.